Con más de dos millones de seguidores sumando Twitter e Instagram, James Fridman es conocido por sus creativos fotomontajes troll de gente que le envía imágenes haciéndole solicitudes serias. Pero no es un troll cualquiera de los que tan solo buscan tocar los huevos sin más. Con sus peculiares interpretaciones de lo que le piden, podría ser considerado como un héroe troll cuya misión es destruir el narcisismo típico de internet armado con su sentido del humor y con su habilidad con Photoshop.
